NOTA DE PRENSA
Cajamarca, Martes 4 de diciembre 2018.
Este 10 de diciembre a las 12 del día, la Sala Penal de apelaciones de Cajamarca, revisará el caso de violación sexual de la menor de iniciales S.Q.R, hoy de 12 años de edad, la misma que denunciara en el 2015, cuando aún tenía 9 años, la violación sexual de la que habría sido víctima desde sus primeros años por parte de su propio progenitor, el periodista Walter Quiroz Cubas.
Como se recordará, el colegiado conformado por los jueces Ramos Tenorio, Suarez Lipa y León Izquierdo, terminaron por Absolver al procesado en diciembre del año pasado, al quitarle mérito de manera sorprendente a todos los medios de prueba fundamentales que se había actuado en el proceso; así desvirtuaron la declaración de la niña realizada en cámara Gesell por cuanto adujeron que la menor no había especificado fechas exactas ni detalles de la violación; dejaron sin efecto el certificado médico legal que arrojaba como resultado “signos de actos contra natura” por cuanto adujeron que no se consignó que el método utilizado fue el “científico” y porque la médico legista no habría descartado otras posibilidad de la desfloración; lo mismo, se le quitó valor a la pericia psicológica por cuanto aducen que la niña no presenta estrés post traumático permanente, entre otros fundamentos que no solo resultan totalmente escandalosos, sino que contravienen normatividad y jurisprudencia sobre el tema de violencia sexual.
Este caso ha llamado la atención de la ciudadanía en general y especialmente de las organizaciones de mujeres, pues desde un inicio evidenció irregularidades y vulneraciones de derechos de la víctima, en tanto se tomaron una serie de decisiones que no solo re victimizaban a la menor agraviada sino que protegían de manera por demás cuestionable al agresor. Recuérdese como el primer magistrado que vio el caso, Mario Abanto Quevedo, dejó en libertad dos veces al procesado, tras cuestionables actuaciones como hacer pública la primera audiencia de caso, pese a que por su naturaleza es privada, poner entredicho la manifestación de la menor, negar que el diagnóstico de “signos de acto contranatura” pudiera significar una violación sexual, y cesar la prisión preventiva argumentando que hacía una profesión de fe a favor del procesado, el cual fugó días después, dejando el proceso paralizado por más de un año hasta que se produjo su captura gracias al programa de recompensas promovida por el Estado.
Lamentablemente, por estas actuaciones escandalosas, este Juez solo ha recibido como sanción una multa, y el procesado salió libre a los pocos meses de su recaptura, luego de la absolución de estos magistrados que curiosamente eran parte del mismo colegiado del Juez Mario Abanto.
El Ministerio Público ha planteado la apelación correspondiente y luego de muchos meses por fin este 10 de diciembre se verá la causa frente a la Sala Penal de Apelaciones de Cajamarca. Esperamos que los vocales a cargo del caso, puedan revertir esta escandalosa decisión, condenando como corresponde al procesado contra el cual hay pruebas contundentes e indiscutibles, protegiendo y reivindicando así el derecho de una menor víctima de uno de los peores crímenes como es la violencia sexual.
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